Wednesday, June 19, 2013

Por favor, que el verdadero farsante se ponga de pie



Tras leer, en el número más reciente de la revista Cineaste, una reseña muy positiva sobre el documental Will the Real Terrorist Please Stand Up, me lancé, con furor de masoquista, a buscar en la intenet la mayor cantidad de fragmentos disponibles en YouTube y otros sitios. No lo pude ver completo, pero vi al menos veinte minutos además de una entrevista con su director, Saul Landau, en el sitio www.DemocracyNow.org, hecha por la periodista Amy Goodman.

No hace falta ver el documental completo para darse cuenta que no es más que otro vehículo de propaganda, realizado por uno de los mejores servidores que el castrismo ha tenido en los Estados Unidos desde 1960. Quien ha visto su documental Fidel (1968) y ha leído algunos de sus artículos en Cubadebate, Progreso Semanal y en el Huffington Post, entre otros medios, sabe que Landau es un excelente ejemplo de lo que es un habilidoso manipulador del sesgo. O sea, enhebra toda una letanía de medias verdades, apoyada por hechos comprobados, las magnífica y se cuida mucho de ponerle algún tipo de contrapartida o investigar opiniones diversas. Luego, hace generalizaciones en base a ello. Parece disfrutar la inversión de roles entre las víctimas y sus victimarios.

En este documental, cuyo título juega con el de una canción de Eminem (Will the Real Slim Shady Please Stand Up), parte de una serie de actos terroristas realizados contra Cuba, desde el derribo del avión que llevaba atletas cubanos desde Barbados en 1976, pasando por las bombas puestas en hoteles cubanos, siguiendo con el derrumbamiento de los aviones de Hermanos al Rescate, que Landau presenta como un grupo que al final se dedicaba a acciones de espionaje y culpa de la acción de la Fuerza Aérea Cubana a José Basulto, el jefe de la organización, para seguir con el caso de Posada Carriles y terminar con el de los Cinco Espías, la importancia de cuyas acciones, por supuesto, minimiza.  Entre los entrevistados -que presenta para ostentar “objetividad”-, están Armando Pérez Roura y Ninoska Pérez Castellón, cuyas palabras escoge y edita muy bien para que aparezcan como paladines de la pro-violencia. También entrevista a Edmundo García.

Narrado melodramáticamente por Danny Glover, -un buen actor que hace una década que no figura en una película decente y que se ha dedicado con devoción a defender la causa de los Cinco Espías y del difunto Hugo Chávez-, el filme tiene como propósito demostrar que en las relaciones entre Cuba y los Estados Unidos, los únicos terroristas han sido los americanos y que el exilio cubano es una comunidad de extremistas de derecha que no respetan la democracia ni la libertad de expresión, sin dejar de acentuar la vieja y gastada monserga de que son producto de una desaparecida república corrupta, controlada por la mafia. Lo interesante, y lo peligroso, es el aval que se le da al documental en medios académicos y en revistas especializadas en cine.

Saul Landau es un hombre brillante que se expresa con una locuacidad envidiable. Nacido en 1936, tras graduarse de la Universidad de Wisconsin, en Madison, se desempeñó como mimo y dramaturgo en San Francisco, a la vez que hacía su dinero como distribuidor de cine. Confiesa que en 1960 visitó Cuba para ver lo que pasaba y vio gente que con su misma edad tenían altos cargos gubernamentales y “usaban su cerebro mejor que yo”. A partir de ahí se dedicó al activismo y a la militancia pro-Cuba en los Estados Unidos. Cuenta que en 1966, el difunto comandante René Vallejo lo invitó para que fuera a Cuba a filmar un documental sobre Fidel Castro que resultó en el ya mencionado Fidel. El panfleto no es más que una serie de secuencias con Fidel Castro visitando diversos proyectos agrícolas y haciéndose el simpático con el pueblo. Al final le concede una entrevista a Landau. Lo estrenó en 1969 a través de la televisión pública y su presentación en Nueva York y en Los Angeles, en 1970, fue frustrada por dos bombas que fueron plantadas en el cine neoyorquino y un fuego en el teatro angelino. Algo similar ocurrió cuando Sandra Levinson lo fue a poner en el Center for Cuban Studies  de Nueva York en 1971.

Landau ganó el premio Edgar Allan Poe de 1981 por su documental Assassination on Embassy Row, sobre el atentado realizado contra el diplomático allendista Orlando Letelier. Ha realizado entrevistas y escrito libros sobre Nicaragua, Chile y el subcomandante Marcos. Es profesor emérito Hugh O. Bounty Chair en Conocimiento Interdisciplinario Aplicado, de la California State University de Pomona y es fellow del Institute for Policy Studies, un think-tank, radicado en Washington.

Recuerdo vagamente sus presentaciones en la televisión cubana y sus entrevistas en los periódicos Granma y Juventud Rebelde así como en otras publicaciones especializadas. Siempre apoyado, siempre apoyando. Nunca me crucé con él porque solamente se movía en los círculos del poder, a los cuales jamás tuve acceso. Lo que más me molesta al oírlo hablar es que maneja demasiada información y estoy seguro que no es posible que la haya obtenido por si solo. Conoce demasiados detalles y muchos son muy similares a los que divulga el gobierno cubano, pero con mayor profundidad. Prestando atención a lo que dice, a su trayectoria y a su militancia, aunque no lo pueda probar con hechos, no me cabe duda de que su información procede, ya procesada y arreglada, de los archivos de la antigua escuela de los Hermanos Maristas. No es meramente un vocero, es un hombre creativo que maneja a conveniencia suya y de quienes sirve, la información que se le da. Resulta muy interesante ver la tergiversación de información que hace en su reciente artículo sobre Yoani Sánchez (“The U.S. Celebrates Yoani, But Does Not Hear Her Message”), aparecido en el Huffington Post.

¿Profesor? ¿Cineasta? ¿Investigador? ¿Periodista? ¿Agente? ¡Por favor, que el verdadero Saul Landau se ponga de pie!

 
Roberto Madrigal

11 comments:

  1. Muy bueno, gracias. Evidentemente, no es un tonto útil, sino un "inteligente" útil, y más que esto.

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  2. Dígase "entrevistó a Edmundo García" y se ha dicho todo

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  3. La engañosamente lamada "Democracy Now" es una organizacion radical dedicada a la destruccion de los Estados Unidos. Editorialmente, funciona como una sucursal del Granma.

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  4. Creo que la Sra. Valdez pudiera abundar acerca de el en sus relaciones con los altos circulos. Todos tambien que las fuentes monetarias para realizar esto proyectos viene de Venezuela y del dinero mandado por los exiliados politicos y "brazeros" en todas partes del mundo. Gracias por el articulo Senor Madrigal.

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  5. Edmundo maricon, picha'e lapiz!

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  6. De madre, estos gringos que van a Cuba a cantar las bondades del sistema pero se ponen una venda en los ojos para no ver las cosas malas...cosas que ellos no tolerarían en su país ni por medio minuto.

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  7. Gracias por tus palabras. Buen olfato para los malos olores.

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  8. Hay muchos "intelectuales liberales" que le han hecho "coro" al Infame en jefe y a su pantomima de Revolucion.......
    El caso descrito en esta oportunidad lo avala.
    El Castrismo ha tenido a su lado a estos elementos, tanto en Estados Unidos como en Europa.
    Los cubanos los hemos tenido en nuestra contra.

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  9. Todos los comunistas recalcitrantes de USA van por el mismo camino de los cubanos ... directo al crematorio o al cementerio.

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  10. Gracias Roberto... Tengo razones para creerte más a ti, en cuanto a lo nuestro, que a cualquier estúpido periódico del mundo...

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